Metamorfosis. El melodrama controla la felicidad de la vida tan hostil, dolente y trágica que nos cubre. El recato se esfuma con la tibia caricia y el beso desgarrador del sometimiento, no se puede decir nada, el cuerpo cede, el alma se entrega... todo se vuelve azul-púrpura. Descenso. Obsesiones circulares, dadoras de vida.
QUE INTENSAAAA!!!
ResponderEliminarTe dejo saluditos, como tas? espero de lo mejor...